miércoles, 18 de noviembre de 2009

La División del Norte


Una hazaña del pueblo

Juan Meléndez de la Cruz

La División del Norte es una de las mayores hazañas históricas mexicanas. Su organización representó un cambio en la guerra campesina y en la revolución. Las masas del norte del país y las que se sumaban en su avance, se incorporaron en ella, la organizaron de la nada y contra todos, le dieron su tremendo empuje, alzaron a uno de sus propias filas, Francisco Villa, como el mayor jefe militar de la revolución y barrieron en su camino con cuanto se les puso por delante.

A diferencia del zapatismo, la División del Norte, es decir, el ejército villista, en la etapa de sus grandes triunfos militares contra el ejército federal no tuvo independencia en cuanto a dirección política y a programa. Avanzó sobre el centro del país hacia el derribamiento del gobierno como uno de los tres cuerpos del ejército en que se apoyaba la dirección de Venustiano Carranza. Pero dentro de esa estructura, tuvo en los hechos una creciente independencia políticamente que subía confusamente desde sus filas.

Esa necesidad nunca habría encontrado forma de expresarse, si no hubiera sido por la existencia del ejército zapatista en el sur. La conjunción entre el ejército campesino y plebeyo que bajaba violentamente desde el norte, encabezado por Villa, y el ejército campesino que desde el sur amenazaba la ciudad de México, dirigido por Zapata, era un hecho tan previsible como temido por la dirección conservadora representada por Carranza, porque significaba unir la mayor capacidad militar con la mayor capacidad política.

Equivalía a unir nacionalmente la insurrección campesina, y aquellos dirigentes sentían que no solo caería el gobierno de Victoriano Huerta contra el cual combatían, sino que también su propia perspectiva de clase iba a quedar bajo una amenaza cuyos alcances no podían prever, pues la capacidad revolucionaria del campesinado era para ellos magnitud desconocida y hostil.

La historia de la División del Norte es la historia militar y social de cómo masas campesinas y plebeyas organizadas en ejércitos se abrieron paso y abatieron todos los obstáculos hasta dominar la mayor parte del territorio del país. En ese sentido, la historia de la guerra civil hasta la caída de Huerta es, no única pero si fundamentalmente, la historia de la División del Norte.

La cinta “Francisco Villa, entre el ángel y el fierro” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 20 de noviembre a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Dado que es la función con la que culminan las actividades de este 2009, al final de la proyección tendremos platillos regionales.

Pies de foto:

129. La División del Norte

134. Villa el guerrillero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario