domingo, 14 de febrero de 2010

Rescatada por el cineclub



¡Vámonos con Pancho Villa!

Juan Meléndez de la Cruz

Durante la revolución mexicana, un grupo de valientes campesinos, conocidos como los "Leones de San Pablo" se unen al ejército de Pancho Villa. El clima social opresor, los desmanes militares, el deseo de participar en el movimiento armado que sacude al país y la admiración por el caudillo de leyenda, los impulsa a “meterse a la bola” para ir al encuentro con su muerte, sin que la ofrenda de sus vidas modifique las circunstancias sociales.

Después de algunas batallas, con más derrotas que victorias, el grupo original es reducido a dos: Tiburcio Maya y el joven "Becerrillo". Una epidemia de viruela se desata entre la tropa y "Becerrillo" cae enfermo. Villa ordena a Tiburcio matar al joven e incinerar su cuerpo. Desencantado, Tiburcio abandona la revolución y regresa a su pueblo.

El reconocimiento a este clásico del cine mexicano llegó varias décadas después de su menospreciado estreno. El rodaje se vio plagado de problemas financieros y una enfermedad del director postergó la filmación durante varios meses. Finalmente, la cinta se estrenó el 31 de diciembre de 1936, en el cine "Palacio" de la capital mexicana y duró solamente una semana en taquilla.

Para entonces, De Fuentes había estrenado el que sería el primer "taquillazo" del cine mexicano: Allá en el Rancho Grande (1936). La popularidad que alcanzó esta comedia estelarizada por Tito Guízar y Esther Fernández eclipsó en su tiempo al poderoso drama sobre el desencanto de la revolución que es Vámonos con Pancho Villa.

A principios de los sesenta, la crítica y el movimiento "cineclubero" mexicano rescataron del olvido a Vámonos con Pancho Villa La cinta se convirtió, junto con El compadre Mendoza (1933) del mismo De Fuentes, en el paradigma del mejor cine nacional.

Vámonos con Pancho Villa volvió a ser noticia en 1982, cuando se transmitió por televisión una versión hasta entonces desconocida, que incluía un final en el que Pancho Villa regresa por Tiburcio Maya y le pide que vuelva a combatir en su tropa. Al negarse, Villa mata a Tiburcio, su mujer y su hija, y se lleva a su pequeño hijo a la revolución. Se ignora si este final fue censurado, o si el propio De Fuentes decidió eliminarlo por encontrarlo innecesario o demasiado cruel. Para el crítico e historiador Emilio García Riera, "la película queda mejor con el final comúnmente visto, un final desencantado que redondea bellamente una obra excepcional del cine mexicano."

Dentro de las cien mejores películas del cine mexicano “Vámonos con Pancho Villa” es considerada la número uno.

En este 2010, año del Centenario de la Revolución, Bicentenario de la Independencia y centenario de Minatitlán como ciudad, para vernos a nosotros mismos y no solo el modo de vida norteamericano, el cineclub “Oro negro” del FLS de la sección 10 del STPRM tiene considerado en su programación puro cine mexicano; si hablamos de identidad y nacionalismo, que no sea solo en el discurso. El programa titulado: ¡Que viva México!, inicia el 19 de febrero a las 19 horas en el auditorio de transportes del Frente Liberal Sindicalista (A un lado del servicio de lavado Hawaiana) en la colonia Petrolera.

La entrada es libre y para todo público. tacoteno@hotmail.com

Pies de foto:

-Antonio R. Fraustro como Tiburcio Maya

-Becerrillo discutiendo con el militar

miércoles, 10 de febrero de 2010

"Oro negro" en Olmecatv

Estimadas/os amigas/os:

Hoy miércoles 10 de febrero de 2010, estaremos en el programa “Diálogo con cronistas del Sur” que pasa en el canal 16 del sistema de cable regional (Coatza-Mina-Coso-Jalti) a las 21 horas. Pueden verlo en línea en:

http://www.olmecatv.com/envivo.html

En la emisión hablaremos de tres etapas de los cines en Minatitlán, que además considero son las mismas en todo el país. En la parte final informaremos de las actividades del cineclub “Oro negro” del FLS de la sección 10 del STPRM ilustrando todas las cintas que exhibiremos en este año.

Estando en el Centenario de la Revolución, Bicentenario de la Independencia y Centenario de Minatitlán sobre ciudad se tejen muchos discursos relativos a valorar nuestra cultura, fortalecer nuestra identidad, etc. Pero todo se queda en la verbalización.

El caso es que para ser consecuente, el cineclub “Oro negro” del Frente Liberal Sindicalista de la sección 10 del STPRM en su programación 2010 denominada ¡QUÉ VIVA MÉXICO! Tiene programadas puras cintas mexicanas (Se adjunta programa).

En tanto el gobierno federal y estatal apenas están armando sus programas, el cineclub “Oro negro” ya lo tiene listo e inicia el viernes 19 de febrero con la cinta “¡Vámonos con Pancho Villa!”

Juan Meléndez de la Cruz


Vámonos al cineclub


En este 2010, año del Centenario de la Revolución, Bicentenario de la Independencia y centenario de Minatitlán como ciudad, para vernos a nosotros mismos y no solo el modo de vida norteamericano, el cineclub “Oro negro” del FLS de la sección 10 del STPRM tiene considerado en su programación puro cine mexicano; si hablamos de identidad y nacionalismo, que no sea solo en el discurso. El programa está titulado: ¡Que viva México!

Iniciamos el 19 de febrero a las 19 horas. La sede del cineclub es av. De los Petroleros s/n, col. Petrolera. A un lado de la delegación de tránsito.

La primera cinta a proyectar es ¡Vámonos con Pancho Villa! De la cual adjunto el cartel correspondiente, agradeciendo la difusión que puedan darle.

Juan Meléndez de la Cruz

lunes, 8 de febrero de 2010

Cineclub “Oro negro”. Programación 2010. ¡Que viva México!

Cineclub “Oro negro”. Programación 2010. ¡Que viva México!

Fecha

Película

19 de febrero

¡Vámonos con Pancho Villa! Dir. Fernando de Fuentes. 1935. 92 mins. Considerada la mejor película mexicana de todos los tiempos.

05 de marzo

Plutarco Elías Calles. Reformar desde el origen. Maestro, agricultor y comerciante, fundó el Partido Nacional Revolucionario.

19 de marzo

¡Que viva México! Sergei Eisenstein. 1931/1979. 85 mins. Una película inusual sobre un país insólito y que dio la base para una estética de lo “mexicano”.

09 de abril

La Zandunga. Dir. Fernando de Fuentes. 1937. 107 mins. Lupe Vélez, Arturo de Córdoba y Joaquín Pardavé.

23 de abril

Muxe’s: auténticas, intrépidas, buscadoras del peligro. Realización Alejandra Islas. 105 mins. Retrato de un grupo de homosexuales indígenas y mestizos de Juchitán, Oaxaca.

07 de mayo

Tejiendo mar y viento, la vida de una familia Ikood (Huave). Realización, Luis Lupone Fasano. 62 mins. La visión indígena y la mestiza se entretejen.

21 de mayo

Aventurera. Dir. Alberto Gout 1949. 101 mins. Ninón Sevilla. Cinta que da la base para la creación del cine de “rumberas”.

04 de junio

Cananea. Dir. Marcela Fernández Violante. 1976. 123 mins. Basada en la huelga minera del 1º de junio de 1906 en el estado de Sonora.

18 de junio

El rey del barrio. Dir. Gilberto Martínez Solares. 1949. 101 mins. Tin Tan se convierte en pintor francés, gánster de Chicago, bailaor de flamenco y profesor italiano de canto.

02 de julio

Tiburoneros. Dir. Luis Alcoriza. 1962. 100 mins.

16 de julio

Pueblo de madera. Dir. Juan Antonio de la Riva. 101 mins.

30 de julio

Salón México. Dir. Emilio Fernández. 1948. 91 Mins. Marga López, Miguel Inclán, Roberto Cañedo, Silvia Derbez.

13 de agosto

Nosotros los pobres. Dir. Ismael Rodríguez. México 1947. 128 mins. Pedro Infante y Blanca Estela Pavón.

27 de agosto

Ustedes los ricos. Dir. Ismael Rodríguez. México 1948. 115 mins. Pedro Infante y Blanca Estela Pavón.

10 de septiembre

Mina, viento de libertad. México-Cuba. 1976. 128 mins.

24 de septiembre

Tlatelolco. Las claves de la masacre. Dir. Carlos Mendoza. 2002. 57 mins.

08 de octubre

Canoa. Dir. Felipe Cazals. 1975. 115 mins.

22 de octubre

Una familia de tantas. Dir. Alejandro Galindo. 1948. 130 mins.

05 de noviembre

El compadre Mendoza. Dir. Fernando de Fuentes. 1933.

19 de noviembre

La sombra del caudillo. Dir. Julio Bracho. 1960. 129 mins. La película maldita del cine mexicano. Una polémica y reveladora historia que provocó un veto de 30 años.

En el año del Centenario de la Revolución, Bicentenario de la Independencia y Centenario de Minatitlán como ciudad, valoremos nuestra cultura, fortalezcamos nuestra identidad para lograr ¡Que viva México!

Sitio: Auditorio de Transportes del FLS, Calzada de los Petroleros s/n, col. Petrolera.

Entrada: Libre y para todo público.

Tercer año del cineclub "Oro negro"


El cineclub “Oro negro”, recreación para la población

Juan Meléndez de la Cruz

Tal como se señala en su Declaración de principios, el S.T.P.R.M. lucha por el afianzamiento de sus conquistas logradas y en general por el mejoramiento económico, físico y cultural de los trabajadores. Lo anterior significa que si bien nuestro compromiso inicial es la gestión laboral, en general la labor de la organización sindical se orienta en la dirección de obtener condiciones para una vida digna.

Esto quiere decir que nuestra organización y su grupo mayoritario, el F.L.S. fomentan y organizan actividades sociales como su posada tradicional en el mes de diciembre, la fiesta para las quinceañeras “La ilusión de mis XV primaveras”, el concurso “Unidos por el canto” y torneos deportivos de diferentes disciplinas (Fut-bol, soft-bol, Voly-bol- Basket-bol, etc.) durante todo el año.

Por eso se ha trabajado en el acondicionamiento del área y construcción del campo “Nanahuatzin” y de ser un área pantanosa es hoy un sol resplandeciente y en él se han efectuado fases eliminatorias de los juegos nacionales petroleros y se llevan a cabo encuentros y torneos deportivos continuamente.

Pero no quedándose en la gestión laboral y en la promoción deportiva, la sección 10 del Sindicato petrolero y el grupo Frente Liberal Sindicalista, procurando ofrecer alternativas de recreación a sus afiliados y al público en general han organizado el cineclub “Oro negro” para proyectar filmes que todos podemos disfrutar, compartir y platicar sobre la experiencia de ver cine.

Aprovechando la infraestructura que ha venido construyendo a lo largo de los años y buscando que los espectadores disfruten del cine en las mejores condiciones, las exhibiciones se realizan en el auditorio de la sucursal Transportes del Frente Liberal Sindicalista que cuenta con 150 butacas en perfecto estado y sala alfombrada.

Dándole continuidad a esta actividad, el día viernes 19 de febrero inicia la programación correspondiente a este año de 2010. Para efectuar esta apertura de actividades, se han realizado los trabajos correspondientes para llevar realizar una temporada más del cineclub.

El programa está listo gracias al trabajo colectivo de varias instancias de nuestro grupo y organización, que han colaborado con nosotros en estos dos años de actividades. El cartel se diseña por la Lic. Dulce María Meléndez Vásquez en la sucursal Transportes del FLS, el tríptico lo realiza el Lic. Héctor Vásquez Alfaro en la Sría. Del interior, los carteles se reproducen en la fotocopiadora de Tesorería y son repartidos por los diferentes comisionados en los diferentes centros de trabajo, las edecanes que atienden al público son trabajadoras que realizan una labor social para la organización.

Realizar tareas culturales en nuestro municipio no es sencillo, pues particularmente, en el caso del cine, hay que luchar contra el monopolio comercial que inunda nuestras pantallas con cine norteamericano. No obstante esto, gracias al trabajo en equipo, el cineclub ha logrado trascender, contando con buena asistencia e inclusive siendo invitado a instituciones de educación superior como la Universidad Veracruzana e inclusive a otros municipios como la perla del Papaloapan.

Todo este trabajo colectivo rinde sus frutos y gracias a el contamos con una asistencia regular, integrado por cinéfilos de la población en general e integrantes de la familia petrolera.

En este 2010, año del Centenario de la Revolución, Bicentenario de la Independencia y Centenario de Minatitlán como ciudad, para vernos a nosotros mismos, el cineclub “Oro negro” del FLS de la sección 10 del STPRM tiene considerado en su programación puro cine mexicano; si hablamos de identidad y nacionalismo, que no sea solo en el discurso. El programa está titulado: ¡Que viva México!, Iniciamos el viernes 19 de febrero a la siete de la noche con la cinta ¡Vámonos con Pancho Villa! Ni más ni menos la película considerada como la mejor de todos los tiempos en el cine mexicano. La entrada es libre y para todo público.

Pie de foto:

El tren en la Revolución. Escena de ¡Vámonos con Pancho Villa!

Cácaro


¡Cácaro! la pantalla se quema

Juan Meléndez de la Cruz

El grito de ¡Cácaro! que se escuchaba en las salas cinematográficas ha caído en desuso. Con la tecnología actual es difícil que ocurra una falla que interrumpa la exhibición de la cinta como antaño sucedía; aunque a veces ocurre.

En el pasado, cuando las películas venían grabadas en rollos de 35 o de 70 milímetros, en ocasiones el proyector se atoraba y la cinta llegaba a reventarse por lo que cuadro o la imagen, al quedase fija, con la temperatura del foco que produce el haz de luz, se calentaba y llegaba a quemarse, produciendo en la pantalla la imagen de un incendio y los gritos inmediatos del respetable público de: ¡CÁCARO! quejándose por la interrupción de la proyección de la película.

Ese grito también puede escucharse cuando la imagen está fuera de foco, el sonido es inadecuado, etc. Pues bien ¿cuál es el significado de la palabra? ¿Cuál es su origen?

Nos cuenta Arturo Zechy, que posiblemente tenga que ver con la palabra caco (ratero) que viene del náhuatl cacomixtle, carnívoro nocturno pequeño con cola de igual tamaño que el cuerpo, con siete a ocho anillos negros intercalados con blancos o grises. Pero el cacomixtle es principalmente herbívoro y aunque puede comer pequeños vertebrados, su dieta principal son hierbas y frutas. Creo que más bien la denominación se debe al mapache, que siendo primo del cacomixtle, tiene un gran parecido con el por el tono grisáceo de su piel, aunque el mapache es más pequeño y como tiene unas manos muy inquietas, si encuentra botes de basura va a revisarlo y se roba lo que encuentra, además que ya trae su antifaz integrado que se ha asociado con la maldad y con los asaltantes. El caso es que hablamos del mapache y como se parece al cacomixtle, al caco, esta denominación se emplea en nuestro país para nombrar a los rateros o asaltantes. Si el operador del proyector, por descuido o accidente u otro motivo me acorta la película, me está robando y puedo, debo reclamarle y en la sala una manera es gritándole ¡cácaro!

Otra posible explicación señala que uno de los operadores del proyector era un fulano que tenía muchos barros en la cara, la piel del rostro cacariza y en nuestro país, empleando el apócope, al cacarizo se le llama cácaro; por lo que, al fallar la película, el operador recibía el grito de ¡CÁCARO! Que se generalizó a todos los que manipulan la proyección y si esta falla, el respetable público protesta con ese grito. Igualmente en el caso de la censura, que mutilaba las cintas, recortando o eliminando las escenas que consideraba no debían ser vistas por el (aquí no tan respetable) público, cuando este se enteraba de la versión original y percibía la mutilación, los gritos de ¡Cácaro! Se escuchaban en la sala.

Estamos hablando de situaciones, costumbres que se fueron con la extinción de las grandes salas de cine, hasta llegar hoy con el concepto de multicinemas es decir varias salas pequeñas juntas y donde, desgraciadamente el tiempo de pantalla es ocupado en más del 90 % por cine norteamericano.

Por estas y más razones sobre las que continuaremos hablando, en el 2010, año del Centenario de la Revolución, Bicentenario de la Independencia y Centenario de Minatitlán como ciudad, para vernos a nosotros mismos y no solo el modo de vida norteamericano, el cineclub “Oro negro” del FLS de la sección 10 del STPRM tiene considerado en su programación puro cine mexicano; si hablamos de identidad y nacionalismo, que no sea solo en el discurso. El programa está titulado: ¡Que viva México!, estén pendientes.

Iniciamos el viernes 19 de febrero a la siete de la noche con la cinta ¡Vámonos con Pancho Villa! Ni más ni menos la película considerada como la mejor de todos los tiempos en el cine mexicano ¡no totol!

Las proyecciones se relazarán en el auditorio de transportes del Frente Liberal Sindicalista situado en la av. De los petroleros s/n, delante de la delegación de Tránsito. La entrada es libre y para todo público.

El miércoles 10 de febrero a las 21 horas, estaremos en Olmeca TV, canal 16 de cablemás en la tv local. Pueden verlo en línea en olmecatv.com

Soñar en inglés


Luchar contra los súper héroes

Juan Meléndez de la Cruz

Pregunto al respetable público ¿Cómo enfrentar al hombre araña, Batman, los cuatro fantásticos y demás engendros que nos recetan todo el año en las pantallas? Pues de ese tamaño es el reto que nos hemos planteado en el cineclub “Oro negro” del Frente Liberal sindicalista del STPRM.

Lo que estoy queriendo decir es que en las pantallas de los cines de nuestro país los súper héroes ¿chinos, japoneses, rusos, etc.? No, los súper héroes gringos son los que acaparan los tiempos de la pantalla, y tienen de su lado todo el dinero del mundo. Más del 90% de la programación de los cines en México es cine norteamericano.

Ojo, no estoy queriendo decir que se deban rechazar las expresiones culturales de otros pueblos o naciones, al contrario, de lo que se trata es de que exista un balance, una variedad de opciones sobre las que pueda uno escoger las de su preferencia. Y además, si estamos en los Estados Unidos Mexicanos, alias México debe programarse más cine mexicano para dar lugar al desarrollo de nuestra industria cinematográfica.

¿Cuándo vemos cine francés, alemán, cubano, brasileño, argentino, español o para rematar, cine mexicano? Casi nunca. Lo ideal sería el que existiera la posibilidad de ver las producciones de todos estos países y más, y lo principal, el se pudiera disfrutar de más buen cine mexicano.

Lo anterior traería como consecuencia el que las imágenes que viéramos en el cinematógrafo tuvieran más que ver con nuestra idiosincrasia, con nuestra cultura, y no, lo que actualmente ocurre, que las películas que mayormente vemos, se refieren a la forma de vida norteamericana. Esto significa que nuestro lenguaje, identificaciones y hasta sueños son referidos a una cultura que no es la nuestra, sino la de un país que es, ni más ni menos, la mayor potencia a nivel mundial, la que mayor energía consume y la que tiene el primer lugar en obesidad y el consumo de coca-cola; y nosotros -para no quedarnos a la zaga- ocupamos en segundo lugar. Aquí está una muestra de la influencia de la industria del entretenimiento norteamericana sobre los hábitos de consumo de la población mexicana.

Por eso y porque el año 2010 es el bicentenario de la independencia, el centenario de la revolución mexicana y el centenario de Minatitlán como ciudad, el cineclub “Oro negro” en su programación de este año están contempladas puras películas mexicanas. Y para que no tengan dudas, no se trata de cualquier cinta nacional sino que la mayoría de ellas están inscritas en la lista de las cien mejores películas mexicanas.

Para su tranquilidad, les diré que la selección la realizaron 25 especialistas de nuestra cinematografía entre los que destacan críticos como Jorge Ayala Blanco, Nelson Carro y Tomás Pérez Turrent; historiadores como Eduardo de la Vega Alfaro y Gustavo García; Carlos Monsiváis y el propio Gabriel Figueroa. De aquí que consideramos que es un buen criterio para haber realizado la selección para la programación del cineclub “Oro negro”.

Con esto, la propaganda que vamos a realizar para invitarlos y algunas otras cosas que inventaremos, la ayuda de radio “bemba” es decir, que inviten boca a boca a familiares y vecinos y, lo principal, con la asistencia del –otra vez- respetable público, podernos sacar adelante el reto que nos hemos planteado, lograr que asistan a ver buen cine mexicano.

La temporada 2010 del cineclub “Oro negro” del Frente Liberal sindicalista de la Sección 10 del STPRM inicia el viernes 19 de febrero a las 19 hrs. con la película ¡Vámonos con Pancho Villa! Considerada como la mejor cinta de todos los tiempos del cine nacional. La cita es en auditorio de Transportes del FLS situado en la Av. De los Petroleros s/n, col. Petrolera. La entrada es gratis.

Pies de foto:

Blanca Estela Pavón, la “chorreada” y Pedro Infante, “Pepe el toro” en la programación del cineclub “Oro negro”

Cines en retirada


Los cines en Minatitlán III

El cierre de una época

Juan Meléndez de la Cruz

Los cines que cerraron una época en nuestra ciudad fueron los “Cinemas Fuerte” de los hermanos García Cazarín, inaugurados el 8 de diciembre de 1986 en la calle Santiago 27, Col. Nueva Mina. El nombre era un homenaje al jefe del clan, el Sr. Fidel García Gómez ya que uno de sus negocios llevaba el nombre de “Fuerte azul” e igualmente, su seudónimo en el club Rotario era ese. Eran dos salas, la uno con una capacidad para 600 asistentes y la dos, para 400 personas.

En realidad, los cinemas “Fuerte”, formaban parte de un proyecto más amplio y ambicioso: Una plaza comercial que abarca toda una cuadra desde la Transístmica y la calle Caracas en la colonia Nueva Mina. Los “Fuerte” constituyeron un proyecto de transición entre los grandes cines como el Mina, Ceiba y el Auditorio, con una capacidad de hasta 2,400 personas y el concepto actual y dominante de cinemas con varias salas con capacidad para centenas de espectadores.

Con su propuesta, los hermanos García Cazarín, apuntaban a lo que vendría en el futuro: Plazas comerciales gigantes, con múltiples comercios y varias salas pequeñas de cine. Aunque su proyecto no pudo realizarse, sin proponérselo, esta familia local estaba señalando el camino que vendría después.

Después de esas salas todo cambió. Esos locales desaparecieron pues el gobierno mexicano preparó todo para beneficiar a las compañías extranjeras con el Tratado de Libre Comercio (TLC). A principio de los años 80’s existían en México cerca de 3,000 salas y en diciembre de 1994 solo quedaban 1432, actualmente ese número debe haberse reducido todavía más.

Las salas grandes no se retiraron así como así, hicieron intentos desesperados para no desaparecer; ensayaron diferentes formas para tratar de atraer asistentes a sus locales. El cine Mina programó Burlesque, espectáculo teatral con tintes pornográficos; el cine Auditorio ofreció películas mexicanas y también teatro pero no porno, sino obras ligeras de relativo éxito y tanto el cinema “Río”, como los “Fuerte” proyectaron películas pornográficas.

Pero todos esos esfuerzos fueron en vano, finalmente todas esas salas se vieron obligados a clausurar sus funciones, correspondiéndole hacerlo a los cinemas “Fuerte” el 25 de marzo de 1995, cerrándose con ello un ciclo en las historia de los cines en nuestro municipio.

Como bien apunta Alfredo Joskowicz (1), director mexicano los antecedentes de la debacle fueron que el estado mexicano realizó un proceso de cierre y venta de sus empresas cinematográficas que finalizó entre 1991 y 1993. Se llevó a cabo la liquidación de las distribuidoras Continental de Películas, Películas Mexicanas y Azteca Films, y la compañía Operadora de Teatros, S.A. (COTSA), que era la cadena de exhibición más importante del país ya que manejaba más de 400 salas, la que fue vendida a TV Azteca en un paquete que incluía dos canales de televisión, 7 y 13 y los Estudios América. Por eso muchos que fueron cines son hoy tiendas Electra o Milano.

Durante los 80’s y principios de los 90’s, gracias a la popularización del video, crecimiento de la televisión de paga, la revolución tecnológica del sonido y a los altos costos de mantenimiento y operación del equipo de proyección esas antiguas salas fueron despareciendo.

El caso es que el cine gringo satura las pantallas en las mejores temporadas, y ocupa también el mayor espacio en las temporadas bajas en detrimento del cine nacional.

Por eso y otras cosas sobre las que continuaremos hablando, en el 2010, año del Centenario de la Revolución, Bicentenario de la Independencia y centenario de Minatitlán como ciudad, para vernos a nosotros mismos y no solo el modo de vida norteamericano, el cineclub “Oro negro” del FLS de la sección 10 del STPRM tiene considerado en su programación puro cine mexicano; si hablamos de identidad y nacionalismo, que no sea solo en el discurso. El programa está titulado: ¡Que viva México!, iniciamos el 19 de febrero, estén pendientes.

(1) Joskowicz, Alfredo. UN PROBLEMA MULTIFACTORIAL. TOMA revista mexicana de cine. Año 1, núm. 4, mayo-junio 2009. P-17-19.

Pies de foto:

01- Entrada al estacionamiento de los cinemas “Fuerte”

02- Locales comerciales en la plaza “Fuerte”

03- La plaza desde Transístmica y Caracas.

Invitando con "cucurucho"

Los cines en Minatitlán II

Para los hermanos Zechy, trabajadores del cine

Juan Meléndez de la Cruz

El teatro Azpeita, y los cines Díaz Mirón y Olimpia, formaron parte de una época que en el siglo XX va de 1920 a 1960. Su capacidad era para centenas de personas. Todos estaban en el centro, con el crecimiento de la ciudad, la capacidad de las salas cinematográficas aumentó y se construyeron cines con capacidad para miles de personas.

Iniciando la década de los 60’s y también en el centro de la ciudad, en la calle Hidalgo (Donde hoy está telas “La Parisina”), se inauguró el cine “Minatitlán” con la película “Éxodo” con Paul Newman y Sal Mineo. Esta sala con capacidad para 2,400 asistentes, contaba con la tecnología más moderna: ¡Pantalla de 70 mm! Tenía proyectores también para 35 mm, es decir contaba con las dos posibilidades para exhibir películas en sendos formatos.

Era propiedad de Francisco Sumohano, residente en Villahermosa y administrada por Juan Pellicer quien era auxiliado por Juan Jacobo Mercader Oropeza; aquí destacaba un personaje que hacia las funciones de velador, “espantador” de chamacos y repartidor de volantes, Delfino Sepasuchi, alias “Blanca nieves”, negro y que andaba sin zapatos; Los volantes se enrollaban dándoles forma de “cucurucho” y se aventaban al interior de las casas, haciéndoles llegar la invitación para asistir al cine. El cuadro se completaba con otro personaje, el “Chamuchín”, bajo y fornido de pelo “chinito”, barrendero del cine que tenía particular inclinación por los chamacos.

En la misma década, en 1965 se inauguró el cine “Ceiba”, situado en Lerdo esquina “5 de febrero” que tenía capacidad para 2,200 personas. Abrió sus funciones con la cinta “Help” de los Beatles (se aceptan correcciones) este cine era propiedad de la compañía Explotadora de Espectáculos, cuyo socio mayoritario era Manuel Ampudia Girón. Formando parte de una cadena nacional, estrenaba las cintas de moda y éxito. Aquí, me refiere Arturo Zechy, dado la gran demanda del público, llegó a pasar en domingo, sin permanencia voluntaria, hasta siete funciones de la película “King Kong”. Debe haber sido en 1976, año en que se estrenó la segunda versión del rey Kong. Creo que en esos años fue cuando a Zechy se la paso la mano con las palomitas, con los resultados que ya conocemos.

Como el cine, desde su fundación ha sido una de las diversiones favoritas, algunos sindicatos han intentado ofrecer recreación a sus agremiados y además el cine estaba en auge, los sindicatos incursionaron en el, construyendo sus propias salas.

De esta forma y en orden temporal, después del “Ceiba” siguió el cine “Auditorio” de la sección 10 del STPRM situado en la calle “Iturbide”; este se inauguró en diciembre de 1969 con una capacidad para 2,000 personas. Sus administradores han sido Adán Cruz Piñón, Manuel Nolasco e igualmente estuvieron como responsables, Abel Fuentes Rivera, Guillermina de la Rosa Vda. De Cabrera, Liborio Alfonso Lobato, Santiago Burelo Toledo y Ricardo Rodríguez Simoneen. Hasta aquí con ellos con proyección de películas; ha continuado en funciones y con otros administradores pero ya sin exhibir filmes regularmente.

Después se inauguró en la calle Michoacán, Col. Bohemia el Cinema “Río” de la Sección Uno del sindicato petroquímico. Este tenía capacidad para 600 personas, ya no para miles como el “Mina” y el “Ceiba”. Como lo pueden ver en la foto, actualmente el espacio frontal del “Río” es ocupado en las mañanas por un grupo de mujeres que realizan ejercicios aeróbicos.

El viernes 19 de febrero, reanudamos las funciones del cineclub “Oro negro” del Frente Liberal sindicalista de la Sección 10 del STPRM. Continuamos con los cines en Mina en la siguiente nota. tacoteno@hotmail.com

Pies de foto:

Ceiba1- El edificio del cine “Ceiba”.

Mina4- Aquí estaba el cine “Minatitlán”

Río3- El cinema “Río”

En la oscuridad de la sala


Los cines en Minatitlán I

Para Renato, en colaboración

Juan Meléndez de la Cruz

¿Por qué desaparecieron los cines grandes? Si el cine ha sido y sigue siendo una diversión familiar, y a pesar del dvd y los precios tan elevados seguimos asistiendo al cine ¿Por qué quebraron esas salas? Algo de eso vamos a hablar en varias notas, vamos a aprovechar para platicar algo acerca de los cines en Minatitlán y para invitarlos a las funciones del cineclub “Oro negro” del FLS de la sección 10 del STPRM.

El ver cine en las grandes salas era otra cosa. En esas épocas (casi desde inicios del siglo XX y hasta fines de la década de los 90’s) la oscuridad de la sala era propicia para poder acariciar(se con) a la novia, las palomitas se vendían en bolsas pequeñas (comparadas con el combo actual) y los vasos en los que se servía el refresco podrían ser de 100 mililitros, es decir, también eran más pequeños; había muchos chamacos corriendo, la permanencia era voluntaria (es decir que uno podía quedarse a ver la película hasta en las dos o tres funciones) el precio de la entrada era considerablemente menor y lo principal (al menos para este redactor) era que podían verse más películas mexicanas.

En Minatitlán, distingo tres grandes períodos en cuanto a la construcción de teatros y salas cinematográficas. El primero iría de la década de 1920 y llegaría hasta los años de 1950, el segundo de los 60’s hasta los años 90’s y el tercero de los noventas hasta nuestros días. Como en muchos otros aspectos, los cambios en nuestra ciudad van ligados a los ciclos económicos y en el siglo XX particularmente a las transformaciones en la industria petrolera.

Cuando niño (década de los 50’s, ¡uuuuuhhhhhh!), asistí con mis hermanos al cine “Olimpia” que funcionó en la calle Juárez en el número 95 atrás del parque Independencia; recuerdo que el local se me hizo grandísimo, ya de adulto no tanto. Hoy el solar está baldío y aún cuenta con los arcos del foro, podría aprovecharse el terreno y construirse un cineclub para la población, le dejo la idea a la autoridad municipal.

En la misma calle, después de un consultorio dental, está la que fue casa del Sr. Efrén Narváez, quien fue contratista de la compañía Mexicana de Petróleo el Águila, trabajador de Pemex y ya jubilado, presidente la Comisión de contratos de la Sección 10 del STPRM, este terreno también podría ser empleado para uso público pues siempre hace falta espacio en el centro de la ciudad.

Pero antes del “Olimpia” en Minatitlán hubo otras salas. Primero, desde la década de los 20’s, el teatro “Azpeita” situado en la calle Hidalgo No. 16 donde hoy está el hotel Nacional. Allí cerca (Precisamente donde hoy se yergue el edificio de la Sección 10 del STPRM) se encontraba la “Casa amarilla” residencia de los empleados ingleses de la Compañía “El águila” y que iban al cine por lo que, en las funciones, se podían escuchar los comentarios en inglés que realizaban algunos de los asistentes.

Me dicen que también existieron el “Díaz Mirón” en Iturbide 45 donde hoy está el banco Scotiabank, por cierto, ese edificio funcionó aproximadamente de 1984 a 1990 como Palacio municipal, si ustedes levantan la vista más allá del anuncio del banco, verán que el edificio tiene forma de teatro.

Otro cine en nuestra ciudad fue el “Rosalinda” que no tenía techo y que también funcionaba como arena de lucha libre, administrado por el Sr. Piña, estaba en la Colonia Santa Clara sobre la avenida “18 de octubre” a un lado del laboratorio de Chela Márquez. Hubo otros cines, pero no con la relevancia y regularidad de los mencionados. Por ejemplo, a iniciativa de sociedades de padres de familia como la de la escuela “Mi patria es primero”, se ofrecían funciones en las que se cobraba la entrada y cuyos fondos eran para mejoras de la misma escuela.

Ya arrancamos, y estamos hablando de cine pues el viernes 19 de febrero, reanudamos las funciones del cineclub “Oro negro” del Frente Liberal sindicalista de la Sección 10 del STPRM. Continuamos en la siguiente con los cines en Mina. tacoteno@hotmail.com

Pies de foto:

El cine Olimpia actualmente (o lo que queda de el)

La puerta del cien Olimpia.

Otra alternativa cultural.

Nota aparecida en el diario "La Opinión" de Minatitlán, Ver. el miércoles 9 de diciembre del 2009; agradeciendo a Isidoro Gómez y su pareja América Guerrero, asiduos asistentes al cineclub por sus comentarios.

Juan Meléndez de la Cruz.

Otra alternativa cultural.

Por. Isidoro A. Gómez Montenegro.

Dentro de la otra alternativa cultural que señala el Lic. Juan Meléndez de la Cruz, quien últimamente funge como funcionario en la Sría. de Educ. Y Previsión Social, nos hemos dado cuenta tanto mi esposa y quien escribe de la labor que ha venido desarrollando en el plano cultural en su promoción particularmente dentro del Cine Club Oro Negro del F.L.S. de la Sec. 10.

No soy dado ha hacer apologías ni a lanzar loas, sino a reconocer el mérito de quienes tratan de mostrar una manera positiva y con ahínco algo que se llama cine o séptimo arte. Una de las corrientes del arte del celuloide, vinculado directamente al plano cultural y la posibilidad de hacerlo llegar a la familia petrolera, a los jóvenes a propios y extraños, a la UGM y a la UV estas 20 cintas, la mayoría clásicas pero vigentes. Algunas ya quedaron grabadas en el imaginario colectivo de quienes las hemos disfrutado en más de una ocasión como: El ciudadano Kane ¿Que hubiéramos hecho con dos Orson Wells? O sin el incomprendido poeta surrealista del cine, Buñuel, así lo definiría Octavio Paz. Con tradiciones en Ramo de Fuego que tuvo un impresionante lleno, pues había gente hasta en los pasillos unos parientes del Estado de San Luis Potosí provenientes de Querétaro dedicados a dar conferencias motivacionales para sensibilizar a los maestros, se llevaron un buen sabor de boca al conocer las costumbres del Istmo de Tehuantepec y degustar los platillos típicos, esto tuvo mayor trascendencia porque pudieron constatarlo.

Los Monólogos de la Vagina otro impresionante lleno por la cantidad de personas que asistió a ver a la escritora Eve Ensler, una obra que revela las frustraciones de la mujer y el valor que se le da en la actualidad o Casa Blanca con el romántico hombre Humphrey Bogart, en fin no terminaríamos de mencionar o elegir en cuanto a calidad y contenido. Al dar la bienvenida quienes hicieron el uso de la voz mencionaron parte de esto: ojalá, que cando salga la presente se haya confirmado, la trascendencia de esta segunda muestra del Cine Club Oro Negro fuera de las fronteras regionales y vaya a la Casa de Cultura de Juchitán, Oax. En la primer muestra también nos dimos cuenta que llegó a Tlacotalpan a la Casa de Cultura estando nosotros de excursión en las Fiestas de la Candelaria nos dimos cuenta. La visión del cine pasada y también la contemporánea debe ser dada a conocer y hacerse llegar a todos y si el intelectual entre los que no me encuentro yo y no por falsa modestia representa con vedad el fenómeno humano y su creación, el esfuerzo que hace la inteligencia al plasmar su idea en un guion y mas adelante reproducirla en una película de esa manera podemos comprender el mundo y quizá transformarlo, sino es que mejorarlo. Reflexiona el Lic. Juan Meléndez de la Cruz afirmando que detrás del Cine Club Oro Negro del F.L.S. hay una infraestructura que lo respalda para dar mejor comodidad al publico, nos ha invitado cada quince días a externar nuestras opiniones y nos ha mostrado la diferencia que hay entre un cine comercial y un cine cultural en este ciclo que concluyó el 20 de noviembre consideramos que: se ha renovado constantemente , se han mejorado las instalaciones, se ha mejorado la iluminación, la pantalla es ahora mas grande y se han degustado al concluir el mencionado ciclo del Cine Club Oro Negro.

Juan Meléndez de la Cruz no dejó de subrayar el respaldo de la Sec. 10 de su infraestructura, del espacio que le brinda nuestro Diario La Opinión y eventualmente otro Diario y agradeció en lo que vale, la presencia de la familia petrolera y de antemano me disculpo, no quiero quedar mal al mencionar algunos funcionarios de la Sec. 10 pues no me sé el nombre de ellos. Estuvo presente el Diputado Leopoldo Torres, el Sindico Primero y recién electo Srío. General de la Sec. 10 Lic. Noé Hernández G. y demás personalidades.

Dando la clausura del ciclo de este año el Presidente del F.L.S. C. Jorge Wade González a las 20:00 hrs. Antes de iniciar la clausura recordó la procelosa época de la Revolución, la figura tan peculiar del caudillo de la división del norte Francisco Villa, por nuestra parte esto nos da una pauta para esa invitación a que se abra otro ciclo y continúe el quehacer cultural y los aportes que se pueden hacer desde diferentes trincheras, enhorabuena Juan Meléndez de la Cruz que haya mas cultura, mas cine D.M no faltaremos, gracias por ser un hombre que tiene guendabiani.

“Y que lo hermoso del tiempo es el presente, el ayer, el pasado, el nunca, el siempre, el intrincado urdimbre de lo que habrá de suceder el día de hoy”.

Atender a los hijos

Puedo ir con la familia

Juan Meléndez de la Cruz

Actualmente, con la larga jornada de labores, al trabajador o trabajadora jefes(as) de familia poco tiempo les queda para atender a sus hijos, para convivir con la familia. Además de llegar agotado y desgastado por el trabajo físico y/o intelectual desarrollado en su lugar de producción, no es fácil que encuentre una alternativa sana y de recreación que posibilite asistir junto con la familia a obtener diversión sana.

Otros factores que juegan en contra de la recreación familiar son los altos costos de los espectáculos comerciales, si llevas a toda la familia te quedas sin recursos para lo básico, para la subsistencia que es la alimentación, o comes o te diviertes; frente a esa alternativa creo que todos sabemos cuál es la elección.

Una posibilidad de recreación es el cine comercial, sin embargo, los altos costos de este: el precio de la entrada, las palomitas, golosinas y refrescos (que están asociadas con la proyección, ya que así nos han condicionado los dueños de las salas) te dejan la cartera vacía en una tarde, lo que también casi hace prohibitivo la asistencia al cine con toda la familia ¿o vas a negarle el refresco y las palomitas a los escuincles cuando te lo piden? ¿Quién puede o se atreve?

Por esto y otras consideraciones, el Frente Liberal Sindicalista y la Sección 10 del STPRM echaron a andar el cineclub “Oro negro”. Esta iniciativa cultural tiene como sede el auditorio de transportes del Frente Liberal Sindicalista, situado en la Calzada de los Petroleros en la colonia Petrolera. Un rasgo distintivo de esta propuesta del grupo mayoritario de la Sección 10 es que la entrada es totalmente gratis, lo que permite la asistencia de toda la familia, por numerosa que sea, a las funciones del cineclub.

Pero no quedándonos en la cuestión económica, la programación del cineclub en este año tuvo como ejes rectores temas importantes para toda la sociedad como los son: los trabajadores y sus organizaciones, la mujer y su lucha por la equidad, la tradición en lucha con la modernidad, la Revolución mexicana; teniendo como fondo la interrogante ¿podrá sobrevivir la tierra? O sea la alternativa no solo es gratuita sino que también tiene la característica de ofrecer películas que proyectan imágenes y asuntos que llaman a la reflexión. Y esta reflexión puede hacerse colectivamente al final de la proyección; después de compartir las imágenes, se abre el debate en el cineclub y allí ha sido posible el intercambio de opiniones de una manera ordenada y respetuosa.

El cineclub ha funcionado ya durante dos temporadas, los años 2008 y 2009 y allí hemos podido ver que trabajadores y jefes de familia han respondido a la propuesta del Liberal asisten a las funciones acompañados por miembros de su familia. Con esto, se alcanza uno de los objetivos del cineclub: ser una alternativa gratuita de recreación para el trabajador petrolero, su familia y también para toda la población.

Una vez que hemos cumplido con dos temporadas de trabajo, y viendo que trabajadores y sus familias han respondido a la propuesta cultural, les decimos que continuaremos con las funciones y que estén pendientes de la programación para el año 2010.

Cumplimos trabajando en equipo

Hemos cumplido y vamos hacia adelante

Autoridades sindicales y administrativas, estimados compañeros, público del cineclub, amigos todos:

Gracias por acompañarnos al cierre de actividades del segundo año del funcionamiento del cineclub “Oro negro” del Frente Liberal Sindicalista y de la Sección 10 del STPRM.

El cierre de un ciclo siempre es momento para reflexionar sobre lo andado y de esta forma haré un repaso rápido de algunos aspectos básicos de esta iniciativa cultural.

Propusimos el cineclub porque a la Secretaría de Educación y Previsión Social le corresponde organizar mítines, veladas culturales y demás actos que tiendan a elevar el nivel moral y cultural de los trabajadores y también tomando en cuenta que hoy vivimos en una cultura audiovisual y de que el cine, también llamado “séptimo arte” es una de las recreaciones favoritas en nuestro medio que se puede aprovechar para ofrecer una alternativa cultural al trabajador, su familia y la población en general.

Señalamos centralmente que no se trata de aprender sobre directores o artistas, sino de degustar (probar una comida o bebida para valorar su sabor) del cine y darse oportunidad de platicar sobre la experiencia de ver Cine, de permitirnos participar con otros de momentos en la historia marcados por la proyección de una película.

Nos trazamos como Objetivos: Fomentar la convivencia familiar y la recreación del trabajador petrolero y la población en general, ofrecer una alternativa cultural gratuita, respaldar las manifestaciones culturales locales y fortalecer la identidad nacional, compartir imágenes similares frente a problemas concretos y reflexionar sobre esas imágenes colectivamente, elevar el nivel moral y cultural de los trabajadores, poner la infraestructura del sindicato al servicio de la población, vernos a nosotros mismos y reflexionar sobre nuestro entorno.

Cumplimos con los elementos básicos que caracterizan a un cineclub que son:

1. Tríptico de presentación. Que incluye ficha técnica de la película, foto, información general y resumen.

2. Presentación de la cinta. Ampliamos la información de la cinta, particularidades, música, etc. Antes de su exhibición.

3. Proyección de la película. Contamos con sala en perfectas condiciones, proyector y cuidamos el sonido y demás, realizando por la mañana las pruebas correspondientes el día de la proyección.

4. cine foro. Es la parte más importante y establece la diferencia con la proyección comercial porque rompe la unilateralidad en la comunicación y permite al espectador participar y no solo ser una persona pasiva pegada a su silla. En todas las funciones se ha dado el debate, escuchando los comentarios de los asistentes.

El cineclub, además de cumplir con los cuatro elementos básicos, ha buscado complementar las funciones con aspectos que se relacionen con las cintas proyectadas y por ejemplo:

En la proyección de los documentales relacionados con la música jarocha se ha obsequiado a los asistentes con comida regional veracruzana y lo mismo se ha hecho en la proyección de documentales referidos a la cultura zapoteca (Puede verse en las notas sobre el documental “Ramo de fuego” en el blog http://cinecluboronegro.blogspot.com/ ).

Antes de la proyección se pone música relacionada con el tema de la cinta, haciendo a un lado la música dominante.

También en el día de la función se exhiben los “extras” contenidos en las cintas a proyectar.

Para cumplir con los objetivos, la programación se diseñó sobre cinco grandes ejes, La industria petrolera y el sindicalismo, la mujer y su lucha por condiciones de igualdad, La Revolución mexicana, La modernidad versus la tradición y teniendo como fondo la interrogante de si podrá sobrevivir nuestro planeta.

Logros. En primer lugar y trascendiendo el inconveniente del precio elevado, el cineclub del sindicato petrolero funcionó de manera gratuita, lo que ha permitido a familias completas asistir a las proyecciones de películas de contenido sin gastar ningún centavo en la entrada.

Superando la limitación principal del cine comercial que condena al espectador a ser una persona pasiva pegada a su butaca y cuya actividad principal consiste en estar consumiendo palomitas y golosinas, en el cineclub “Oro negro” se ha dado la participación ordenada y respetuosa de los asistentes, formulando sus comentarios relativos a la película proyectada.

El promedio de asistencia fue de 80 personas por función y si bien puede parecer una asistencia escasa, es un número exitoso para un cineclub.

Las actividades realizadas han impactado en otros ámbitos y gracias a eso hemos recibido diversas invitaciones para que las películas del cineclub sean proyectadas en otros lugares, entre ellas destaco la invitación efectuada a su servidor por el comité organizador de la Feria de la Candelaria de Tlacotalpan, Ver. y de la Facultad de Medicina y Trabajo social de nuestro municipio y han establecido contacto con nosotros la Casa de cultura de Juchitán, interesados en que estemos por esas tierras “desconocidas” llevando la programación del cineclub.

La difusión realizada de las actividades: Publicación de notas en el diario “La opinión”, ocasionalmente en el “Diario del Istmo” y en otros semanarios locales, el envío de las mismas por medio de la internet y el contar con un blog (diseñado y manejado por Yaen Tijerina Meléndez) http://cinecluboronegro.blogspot.com/ que puede ser visto en todo el mundo, posibilitó que personas e instituciones con objetivos similares se pusieran en contacto con nosotros para sumar esfuerzos. De esta forma el antropólogo y jaranero Álvaro Alcántara nos dio la referencia de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas CDI ante la cual gestionamos y obtuvimos la donación de un ciclo de cine indigenista conteniendo 28 cintas, 15 en formato DVD y 13 en VHS. Una de las cuales (Laguna de dos tiempos) fue empleada en la programación de este 2009. Igualmente estamos en comunicación con el minatiteco y Dr. En historia, Héctor Luis Zarauz López, quien envió para publicación la nota “La tehuana en el cine nacional” relacionada con la cinta “Ramo de fuego”.

El funcionamiento regular y exitoso se hizo posible gracias al trabajo en equipo del sindicato. El cartel se diseña aquí en Transportes, el tríptico se elabora en la Secretaría del interior y se imprime en la Tesorería (3er piso) allí mismo se imprimen los carteles en doble carta que se distribuyen por medio de los comisionados sindicales a los centros de trabajo jurisdiccionados a la Sección 10 y que son pegados por ellos y el personal que los auxilia, la secretaría de trabajo de la refinería envía a las edecanes que entregan los trípticos y acomodan a los asistentes el día de la función..

Transportes, Interior, Tesorería, secretaría de trabajo, comisionados, todo el equipo de la organización, de nuestro grupo y nuestra Sección trabajando a favor de esta propuesta cultural.

Todo este trabajo es posible gracias a la sensibilidad y al interés de nuestra dirigencia por ofrecer cultura y recreación a la familia petrolera y poner la infraestructura de nuestro grupo al servicio de la población. Por eso agradezco a nuestro líder Jorge Wade González y a nuestro Srio. Gral. el Lic. Donaciano González Hidalgo su respaldo para el cineclub “Oro negro”, sin su invaluable apoyo, no hubiera sido posible esta alternativa cultural.

Hemos cumplido y fue de esa manera, gracias al trabajo del gran equipo que somos el Comité Ejecutivo Local y todos los trabajadores que nos respaldan.

Durante este 2009, por medio de las notas publicadas, entrevistas en la radio, correos en la red de Internet, etc. Nuestro grupo, el FLS y nuestra Sección 10 del STPRM estuvieron en la opinión pública mostrando que somos una organización que además de la gestión laboral, también ofrecemos cultura y recreación para la familia petrolera y para toda la población.

El trabajo cultural del cineclub “Oro negro” tiene continuidad y ya estamos preparando la programación del año 2010.

Muchas gracias.

Juan Meléndez de la Cruz

Srio. De Educación y previsión social.

Minatitlán, Ver. 20 de noviembre de 2009.