
Juan Meléndez de la Cruz
Para hablar de violencia es necesario ofrecer algunas definiciones. El diccionario indica que es la aplicación de medios fuera de lo natural a cosas o personas para vencer su resistencia. El concepto de poder y jerarquía está presente ya que la violencia es considerada como una forma de ejercer poder sobre alguien situado en una posición de inferioridad jerárquica o subordinación.
La violencia es una expresión humana que posee un carácter histórico, es universal y a la vez específica en las diferentes formas de organización social. Puede considerarse como una relación desigual de fuerza y poder por medio de la cual se busca el aniquilamiento, el dominio o la muerte de las personas, de su psiquismo, de grupos, instituciones o naciones.
En un sentido amplio, la violencia se manifiesta bajo dos formas: una menos evidente, que es la institucionalizada o estructural, y otra abierta y directa, que llama más la atención que la anterior. La violencia estructural está presente en los sistemas políticos, económicos y sociales que mantienen la opresión de determinadas personas a las que se les niegan beneficios sociales, políticos y económicos haciéndolas más vulnerables al sufrimiento y a la muerte.
La violencia estructural sirve de base a la violencia directa, porque influye en las pautas de socialización que llevan a los individuos a aceptar o a infligir sufrimientos, según la función social que desempeñen.
La violencia más expandida y que afecta a una cantidad mayor de mujeres cotidianamente, sin distinción de edad, educación ni condición socioeconómica, es la que transcurre en el hogar y que ha sido denominada violencia doméstica o violencia intrafamiliar. Ha sido definida como “todo acto cometido dentro de la familia por uno de sus miembros, y que perjudica gravemente la vida, el cuerpo, la integridad psicológica y/o la libertad de otro de los miembros de la familia”.
Dado que en Latinoamérica ceca de dos terceras partes de las mujeres tienen como espacio central de actividad el ámbito doméstico, la Organización de las Naciones Unidas ha afirmado que la violencia en contra de la mujer constituye el crimen encubierto de mayores proporciones.
En México el 67 % de las mujeres sufren violencia en su casa.
Violencia física. Que va desde el portazo hasta los golpes que provocan lesiones mayores, incluyendo la utilización de armas blancas o de fuego.
Violencia sexual. Se refiere a la presión ejercida por algún miembro de la familia sobre otro con fines sexuales, la presión puede darse a través de la fuerza física o por medio del amedrentamiento, la amenaza, el engaño, etc.
Violencia psicológica. Que abarca todas las agresiones que tienden a descalificar o deslegitimar el lugar del otro como un igual.
Y violencia simbólica. Que es la más cruel, es la que justifica la dominación masculina, dando por hecho la inferioridad de la mujer. Violencia que impone que las cosas "son así", dando por natural una construcción social que no tiene razón de ser y que coloca a la mujer en una situación de ciudadana de segunda categoría.
El tema de la violencia contra las mujeres es abordada por la cinta “Los monólogos de la vagina” que será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 23 de octubre a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.
Pies de foto:
Mujeres afroamericanas
Mujeres orientales
También mujeres mayores
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