martes, 25 de agosto de 2009

Decirle a una gorda es...


El peor insulto

Juan Meléndez de la Cruz

Hoy, el peor insulto es decirle a una gorda que lo está. Las respuestas a esto van desde un rechazo rabioso, pasando por varias justificaciones, cruzando en algunos casos por una aceptación resignada, hasta llegar a tímidos deseos de cambio.

Hablando del primer caso, una compañera de trabajo furiosa me dijo “Ya le iba a dar una cachetada al director pues me dijo gorda, y eso, ni a mi marido se lo permito”; en el segundo caso se manifiestan razones como, “es que yo engordo simplemente tragando rebanadas de aire”; el tercer caso se manifiesta con un encogimiento de hombros y en el último, con leve sonrisa dicen: “Si, ya voy a cuidarme la boca”.

El que, como país ocupemos el segundo lugar en obesidad solo después de los Estados Unidos (con una economía muy superior a la nuestra) obedece a múltiples factores.

Uno de ellos es la disponibilidad en múltiples puntos de venta de la comida chatarra y los refrescos con gas; si bien el fondo de esto es la preponderancia de los intereses comerciales de las transnacionales que con diversas prácticas han monopolizado el mercado y hasta en las escuelas se vende pura comida chatarra.

Otro es que las largas jornadas de trabajadoras y trabajadores limitan el ejercicio físico y determinan el abandono de los hijos en los fuertes brazos de la niñera electrónica ¿Saben quién o qué es?

Otra de las causas que favorecen el sobrepeso es el sedentarismo (Falta de ejercicio físico); con el engaño de la pretendida “comodidad”, niños y adultos nos la pasamos sentadotes frente la televisión y con el control en la mano, sin movernos.

A lo anterior se suman los malos hábitos alimenticios que con la ingesta excesiva de grasa (Cerdo en todas las fiestas como platillo principal) y calorías, ponen al organismo en una situación vulnerable que conlleva a enfermedades de tipo cardiovascular, tensión arterial, diabetes, entre otras.

La gordura implica una serie de inconvenientes, desde soportar los sobrenombres y bromas de los demás (aunque al ritmo que vamos en que el 70% de la población en México tiene sobrepeso esto tiende a disminuir) hasta no encontrar fácilmente ropa de tu talla, estar expuesto a accidentes con consecuencias negativas como fractura de huesos, no hallar acomodo para dormir y roncar escandalosamente, cansarte ante cualquier esfuerzo físico, etc.

Ante este panorama puede formularse la pregunta ¿Por qué ante tantos inconvenientes seguimos comiendo y engordando? Posiblemente parte de la respuesta está apuntada en la disponibilidad de comida chatarra, sedentarismo y malos hábitos como ya apuntamos a lo que puede agregarse la falta de responsabilidad.

Pero ya me desvié, el tema del sobrepeso, las relaciones familiares, la necesidad de independencia, la familia como núcleo inamovible, las ideas tradicionales que reproduce y otras cosas están abordadas en la cinta “Las mujeres verdaderas tienen curvas” que será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 28 de agosto a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

Ana y Estela son bellas.

El calor me hace sudar como cerdo.

Los padres de Ana.

viernes, 21 de agosto de 2009

Lo principal es la salud


No es por estética, sino por salud

Juan Meléndez de la Cruz

Contrariamente a la creencia en nuestro medio [Istmo, Sur de Veracruz, México (?)] de que una persona obesa está saludable ¡moza! –Decimos- es al revés, el sobrepeso aumenta la probabilidad de enfermarse.

Aunque la cinta “Las mujeres verdaderas tienen curvas” se orienta a defender el derecho de las mujeres a ser queridas por lo que piensan y no por el físico, creo que los aspectos que juegan en la discusión son muchos más y no solo se debe atender a la cuestión estética, sino que el criterio central debe ser la salud.

El problema de sobrepeso en nuestro país es un asunto grave debido a que el 70 por ciento de la población mayor de 20 años lo padece; datos proporcionados por el secretario de Salud, revelan que a nivel mundial nuestro país ocupa la segunda posición en este mal, solamente por debajo de Estados Unidos.

La obesidad representa un gran gasto, equivale en promedio a diez veces el presupuesto que se le asigna a los programas Oportunidades y Liconsa, es el 11.6 % del total de gasto de salud en México y en términos monetarios es de 330 millones de pesos.

La obesidad es factor de riesgo para la generación de ciertos tipos de cáncer, anomalías en las articulaciones, trastornos pulmonares y respiratorios, problemas cardiovasculares e infecciones en la piel, a la vez que se relaciona estrechamente con la diabetes mellitus e hipertensión arterial.

La mitad de las personas obesas presentan alteraciones que se relacionan con los infartos y la hipertensión. Igualmente son más vulnerables a infecciones en la piel derivadas de los pliegues que se forman en ella, aglomerando colonias de bacterias por mala higiene.

Es preocupante que la obesidad se presenta con mayor frecuencia en los niños, hecho que ha ocasionado que haya infantes desde los 12 años con diabetes mellitus tipo 2.

Un niño obeso que llega a los 20 años de edad con sobrepeso, tiene 80 veces más posibilidades de desarrollar diabetes que uno que ha mantenido su peso corporal en niveles adecuados.

La mejor manera de eliminar grasa es gradualmente, a razón de un kilo por mes; vigilar la relación peso-estatura, por ejemplo, si un varón mide 1.70 metros debe pesar 70 kilos; tratándose de una mujer con la misma estatura, el peso debe ser de 60 kilogramos.

El tratamiento es a largo plazo y los fármacos, tés, dietas y emplastes que se ofrecen para reducir de peso en una semana o un mes, en realidad lo que hacen es expulsar agua, no grasa. Generalmente el peso perdido se recupera en poco tiempo y a veces hasta más.

Es necesario cambiar nuestra alimentación: Aumentar el consumo de fibras, cereales, verduras frescas, evitar comidas fuera de hora, suprimir el consumo de dulces, golosinas, refrescos azucarados y fomentar el consumo de jugos de frutas naturales.

Otra de las medidas indispensables es realizar ejercicio por lo menos tres veces a la semana. Abandonar la televisión y salir a caminar y a hacer ejercicio.

La cinta “Las mujeres verdaderas tienen curvas” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 28 de agosto a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Hay material para la discusión al final de la proyección.

Pies de foto:

-Me quieres atractiva para que atrape a un hombre

-Por qué habría de escucharte

-Vean los hermosas que estamos

Mujeres de verdad

Estimadas/os amigas/os:

El cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 del STPRM es una alternativa cultural que nuestra organización ofrece para el trabajador petrolero, su familia y también a toda la población.

Manteniendo el esfuerzo de atraer a esta actividad el mayor número de asistentes, adjunto el cartel de la cinta “Las Mujeres verdaderas tienen curvas”, agradeciendo su difusión y reiterando la invitación para que nos acompañen.

Juan Meléndez de la Cruz

Luchar contra la gordura


Juan Meléndez de la Cruz

El título “Las mujeres de verdad tienen curvas” responde a la idea de que las mujeres no tienen que ser súper delgadas. Esta cinta, la opera prima (primera película) de la realizadora colombiana -radicada en los Estados Unidos- Patricia Cardoso es una comedia con toques románticos y dramáticos trabajada con indudable eficacia, y satisfactoria para el gran público, colorida, basada en la obra de teatro del mismo nombre, con una mujer en la dirección y también con una heroína en un contexto machista y discriminatorio que incluye un tradicional y represivo entorno familiar.

"Las mujeres verdaderas tienen curvas" se centra en la odisea de Ana (descollante trabajo de América Ferrera), una brillante alumna de 18 años que lucha contra su gordura y contra los prejuicios de su madre (la gran Lupe Ontiveros), que prefiere que siga los pasos de su hermana Estela (Ingrid Oliu) en una precaria fábrica textil que trabaja en condiciones infames para las grandes tiendas de ropa antes que aceptar una ventajosa beca para continuar sus estudios en el ámbito universitario.

El largometraje de Cardoso demoró casi una década en concretarse y sólo se pudo filmar gracias al apoyo del grupo HBO, que aportó buena parte de los tres millones de dólares del presupuesto. En un principio, esta oda al esfuerzo y al talento femenino iba a ser estrenada en la televisión por cable, pero la catarata de premios cosechada en festivales como los de Sundance y San Sebastián permitió que se estrenara primero en los cines.

La directora construye la epopeya de Ana con nobles armas, apelando a situaciones creíbles (el apoyo de un profesor chicano, la iniciación sexual con un compañero de clase, los constantes desplantes de su madre o la complicidad de su querible abuelo) y a logrados toques de humor, como la escena en que las obesas trabajadoras se van quitando sus ropas -y sus inhibiciones- ante el calor insoportable de la fábrica.

Cardoso no es del todo condescendiente ni demagógica, pero por momentos resulta bastante explícita en su denuncia de los sometimientos que sufre la comunidad chicana y tampoco profundiza demasiado en las problemáticas concretas de su protagonista.

Retrato que opta por un medio tono casi permanente, "Las mujeres verdaderas tienen curvas" es, indudablemente, una historia muy humana y casi siempre disfrutable, aunque en el fondo no agregue demasiado en términos de mirada sociológica sobre las contradicciones generacionales entre aquellos que nacieron e intentan desarrollarse dentro de la sociedad estadounidense y sus padres, que siguen atrapados por las costumbres y los valores que acarrearon desde sus países de origen.

La solidez del reparto, que combina con bastante naturalidad el inglés y el castellano, y la apropiada banda sonora en la que desfilan canciones de Manu Chao, Aterciopelados, Banda Llaneros y Elíades Ochoa son otros aspectos destacables de una película que, a fuerza de emoción y sensibilidad, termina sobreponiéndose incluso a sus propias limitaciones.

La cinta “Las mujeres verdaderas tienen curvas” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 28 de agosto a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

- El abuelo de Ana

- Es talla siete, no te queda

- Estela preocupada

- Estrías de este a oeste

Mujeres verdaderas


Idealización de la forma femenina

Juan Meléndez de la Cruz

Una constante crítica hecha a los medios de comunicación es la idealización de la forma femenina, y el establecimiento de criterios estéticos inalcanzables, cuya lógica consecuencia es la inseguridad y la falta de confianza y auto-estima que afecta a tantas mujeres en la actualidad.

"Las Mujeres Verdaderas Tienen Curvas" busca ser un antídoto para ese fenómeno, y aunque transmite un mensaje válido y relevante, la discusión está abierta sobre el tema.

En un barrio mexicano de Los Ángeles vive Ana (América Ferrera) con su familia. Ella acaba de terminar la preparatoria, y aunque tiene oportunidad de ingresar a la Universidad, su madre Carmen (Lupe Ontiveros) determina que la muchacha tiene que trabajar en la fábrica de ropa de su hermana, para apoyarla y cumplir su deber con la familia.

Además de ese terrible destino, Carmen regaña constantemente a su hija, pidiéndole que baje de peso para que pueda conseguir marido. Pero Ana está contenta con su figura, y esa confianza le ayudará a romper con la tradición y con los obstáculos que su familia y la sociedad le imponen.

Las intenciones de "Las Mujeres Verdaderas Tienen Curvas", son encomiables, sin embargo, en algunas partes no redondea; por ejemplo cuando Ana desestima la crítica de su mamá diciéndole, tú también estás gorda.

Desde luego tenemos a la pintoresca familia mexicano-norteamericana para dar sabor a la historia, aunque la etnicidad de los personajes no es realmente importante. La trama hubiera funcionado igualmente bien con personas de cualquier credo o nacionalidad.

En cierto modo eso subraya la universalidad del mensaje que se transmite, pero por otro lado la película se convierte en un drama familiar genérico, que puede ser común a muchas familias. El conflicto entre la modernidad y la tradición ¿Debe ir Ana a estudiar o debe renunciar a ser universitaria y quedarse a ayudar a su hermana Estela?

Las actuaciones son muy buenas. América Ferrera es perfecta en el papel principal. Sin esfuerzo alguno logra transmitir sabiduría que trasciende su edad, lo cual se refleja no sólo en sus conflictos familiares, sino en su tímido romance con un muchacho norteamericano.

Por su lado, Lupe Ontiveros es igualmente efectiva como la madre de Ana, cuyas anticuadas actitudes y estrictas decisiones no son producto de la malicia, sino del profundo amor que tiene por su familia.

Sin embargo, a fin de cuentas, creo que el mensaje de tolerancia y auto-estima que propone "Las Mujeres Verdaderas Tienen Curvas" es más importante que las fallas narrativas o estilísticas de la obra. Algunas personas podrían tomarla como una afrenta (particularmente los fabricantes de cosméticos), pero su intención es obviamente buena y digna de aplauso. Ahora, el problema de la obesidad en México no está solo en las mujeres, afecta a todos los grupos de población. Buen tema para abordar al final de la proyección.

La cinta “Las mujeres verdaderas tienen curvas” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 28 de agosto a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

-Lupe Ontiveros como la mamá

-América Ferrera como Ana

Hacia la construcción del sindicato nacional IV


Obstáculos que se enfrentaron

Juan Meléndez de la Cruz

A finales de los años veinte, los obreros petroleros habían logrado consolidar los sindicatos de empresa, pero esa estructura organizativa era insuficiente para las circunstancias históricas, laborales y jurídicas de los años siguientes.

Varios factores contribuyeron para hacer lenta, y en ocasiones violenta, la formación del sindicato nacional. Los obstáculos fueron varios. Entre ellos destacan:

a) La heterogeneidad de los oficios y la diversidad de las funciones para ejecutar los trabajos en los sindicatos de empresa.

b) El convencimiento de los dirigentes “pioneros” (constructores de las primeras organizaciones) acerca de los beneficios que se podían perder por la formación de un sindicato único. En el caso de los petroleros, este proceso estuvo plagado de fuertes discusiones entre los sindicatos de empresa más importantes (por el número de trabajadores afiliados y porque ponía en riesgo las reivindicaciones económicas logradas).

c) La oposición del grupo callista (producto del desconocimiento de la evolución sindical mundial y de la situación nacional) que se manifestaba a través del sindicato de oficios varios de Cd. Madero.

d) El divisionismo provocado por al existencia de distintas fuerzas al interior de los sindicatos y las inevitables pugnas intergremiales.

e) Aunado a lo anterior, jugaba contra el carácter nacional de la organización sindical la funcionalidad de las relaciones al interior de las distintas empresas, misma que era redituable al dueño pero también a los agremiados.

Por un lado, convivían en los sindicatos de empresa ideologías diversas: anarcosindicalista, comunista, revolucionaria, institucional y de trabajadores independientes (trabajadores que no comulgaban con las ideologías anteriores, pero que luchaban por mejorar sus condiciones de vida y trabajo).

El liderazgo ejercido en los sindicatos de empresa era más cercano a los trabajadores; generalmente el líder conocía de primera mano los problemas que afectaban al obrero y podía ser intermediario directo con la gerencia de la empresa para resolver los problemas de manera amistosa. El hecho de que los delegados sindicales convivieran con los trabajadores evitaba la desconfianza hacia su gestión. Por otro lado, la empresa reconocía la función de los delegados y aceptaba la negociación directa.

A su vez, las compañías que controlaban el ciclo productivo (exploración, explotación, distribución y venta del crudo y sus derivados) eran extranjeras en un 97% y cuando se dieron cuenta del avance para constituir el sindicato nacional, utilizaron todos los medios a su alcance para impedirlo.

En los campos petroleros de Veracruz y San Luis Potosí los patrones decidieron bajar la producción y cerrar pozos, afectando con ello la refinación (el crudo no llegaría a las refinerías). Después justificaban el despido de los trabajadores, argumentando que no eran necesarios por la baja producción de los pozos. El caso es que la organización del sindicato único fuera en ocasiones contradictoria y penosa, que tuviera avances pero también retrocesos. 1935 fue el año en que finalmente se logró la unidad, aunque su consolidación ocurriría hasta después de la nacionalización.

Pies de foto:

-Manejando la steelson

-Perforación, guiando la barrena

Hacia la construcción del Sindicato Nacional III


Transición a un estado nacionalista

Juan Meléndez de la Cruz

El proceso de sindicalización de los trabajadores que lleva a la constitución del sindicato nacional de industria, no solo inicia con la explotación del petróleo en Veracruz, ni responde exclusivamente a las condiciones laborales, puede explicarse en el contexto de un amplio fenómeno de transición mundial en el que las estructuras y relaciones políticas, económicas y sociales pasan del marco del liberalismo económico al del intervencionismo estatal.

México se ve impactado por esa transición mundial. Acabado el movimiento armado, que se había iniciado en 1910, comenzaba una fase inicial de definición para el futuro de la nación: la reconstrucción del país pasa necesariamente por la institucionalización de los mecanismos para transmitir el poder político.

Las relaciones entre el poder político y los organismos obreros no fueron sencillas, respondieron a diversas situaciones y estrategias. En ocasiones el gobierno contó con el apoyo decidido de la fuerza obrera y ésta, a su vez, con el respaldo estatal; mientras que otras veces el enfrentamiento fue abierto. Ambas situaciones deben considerarse con cuidado porque explican los diferentes estadios por los que transcurrió la formación de los sindicatos.

Cada conflicto señala una etapa en el acomodo de las fuerzas sociales en un sistema político en formación y es por ello que la relación entre el poder político y los sindicatos no se puede explicar sólo a la luz de una lucha por el poder con base en principios de clase.

Es en un marco más amplio, en el de la definición de un proyecto nacionalista de formación de capital y de estrategias por encontrar mecanismos de distribución de ingresos entre los núcleos organizados de la clase obrera, donde se podría encontrar una explicación de las relaciones de conflicto y colaboración.

Un ejemplo fue el pacto de colaboración entre la Casa del Obrero Mundial y Venustiano Carranza, jefe del ejército constitucionalista. El pacto benefició a ambas partes, porque Carranza encontró soporte y fundamento social para iniciar el proceso de pacificación del país y los obreros puediron a pesar de su importancia relativa entre la fuerza trabajadora de México, influir en la redacción de la constitución con sus demandas. Sin embargo, el pacto fue roto cuando los anarquistas, influyentes en ese momento entre las dirigencias obreras y contrarios a la colaboración con el gobierno, pusieron en duda el modelo de acumulación que se proponía para el país.

Existen objetivos comunes, entre el gobierno y las organizaciones obreras: un marco general de protección a la industria, en el que fundamenta una política de seguridad en el empleo y la formación de empresas de alcance nacional que impulsen ala economía a través de la dotación de insumos, infraestructura productiva y de transporte; una industria cuyos trabajadores tengan conciencia de su función productiva y del modelo de nación que se pretendía, y ese era el caso de los petroleros.

El nacionalismo del movimiento obrero, se constituye en un periodo de transformación de aquel estado porfirista que favoreció la inversión extranjera sin reparar en las condiciones de vida de la población trabajadora a otro emanado de la Revolución, que transita de la inestabilidad hasta el establecimiento de un estado de tipo benefactor que organiza y consolida las fuerzas sociales como precondición para el posterior desarrollo económico y social del país.

Pies de foto:

-El petróleo pertenece a México

-Perforación, trabajando en equipo

Cultura del acoso sexual


Juan Meléndez de la Cruz

Los empleos de las minas norteamericanas se abrieron a las mujeres en 1975, y la primera mujer que obtuvo un trabajo en esta mina en particular es Glory (Frances McDormand). Ella está perfectamente adaptada al mundo de los mineros. Por su labor en el sindicato se ha ganado el respeto de los hombres, quienes también tienen palabras y alusiones soeces hacia ella, pero Glory tiene la capacidad para desarmarlos con un fuerte y aplastante sentido del humor. Es difícil competir contra ella, quien muy pronto se convierte en la guía y mejor amiga de Josey.

Aunque el acoso y la actitud sexista en la mina ya es una realidad cuando Josey comienza a trabajar, su resistencia a aceptar esa realidad se conjuga con el atractivo que los hombres sienten hacia ella y la hostilidad se incrementa. Al hablar de acoso no estamos hablando de comentarios vulgares solamente. Hay serios incidentes de violencia y represión contra las mujeres que acompaña las burlas y las actividades amenazantes de todos los días.

En el filme, los mineros son seres unidimensionales, acosadores grotescos, vulgares y brutales. No es difícil creer que existan hombres así. Los hay. Pero es difícil creer que todo haya sido tan blanco y negro, sobre todo al considerar que la mayoría de las mujeres que trabajaban en las minas estaban casadas con mineros; por esta razón la demanda de Louis Jensen contó con el apoyo de muchos hombres.

La cultura del acoso sexual se impone en un trabajo a pesar de que sólo unos cuantos hombres son los abusadores. La pasividad de los demás hombres y la aceptación del resto de mujeres es lo que hace el caso real de Louis Jensen tan devastador. Esa dimensión social más amplia se intuye aquí en algunas escenas, sobre todo cuando Josey declara en el comedor que ha sido atacada, pero no es apoyada.

Las escenas en el tribunal, que al principio se sienten como “flash forwards” (anticipaciones del futuro, lo opuesto de un “flash back”) poco a poco se apoderan de la historia, hasta que se convierte en la médula narrativa. Woody Harrelson interpreta a Bill White, un abogado del área que acaba de retornar de Nueva York, un poco amargado quizás por su fracaso, pero que termina por aceptar el caso de Josey sólo porque el caso le da la oportunidad de hacer historia, puesto que sería la primera vez en la historia que se realizaría una demanda de “clase” por acoso sexual (“class action lawsuit”).

La estructura tan brillante del guión de Seitzman se torna en una trampa hacia el final, cuando el empuje de la trama pasa a manos del abogado. Josey, en cambio, encuentra su triunfo en un reencuentro con su hijo de trece años, quien había mostrado rebeldía ante ella y había tomado por un tiempo el lado de sus detractores.

Richard Jenkins, en el papel de Hank, padre de Josey, aporta una interpretación sensible, emotiva, y en un sentido profundo, espectacular, como un hombre que debe elegir entre aceptar la cultura de los mineros o apoyar a su hija. En su dolorosa vacilación está la encrucijada de la historia.

La cinta “Tierra fría” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 14 de agosto a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

-Discutiendo con el padre

-Hank en el comedor

-Woody Harrelson como Bill

Representación y defensa

Tirar al niño con el agua sucia

Juan Meléndez de la Cruz

El término “Sindicato” proviene de la acepción latina “Sindycus”, con la que los romanos designaban al defensor de los derechos de una corporación. En Grecia representaba lo mismo que en Roma; era el defensor de alguna institución y el representante de ésta en su defensa. Es decir, “SINDICATO”, EN SU SENTIDO ETIMOLÓGICO, SIGNIFICA REPRESENTACIÓN Y DEFENSA.

En la evolución humana, la historia de la asociación en defensa y protección de los intereses de clase, por parte de aquellos que trabajan y lo hacen para otros, es larga y penosa y pueden identificarse cuatro etapas:

La primera, cuando el trabajo era considerado como indigno de la persona humana y fueron escasos, endebles y estériles los intentos de organización de los trabajadores.

En la segunda, inicia y se fortalece el espíritu clasista de los obreros y la exigencia de unirse en defensa de sus derechos. En todos los países se prohibieron este tipo de agrupaciones y se castigó severamente a sus instigadores y dirigentes.

La tercera se caracterizó por el paso de la prohibición a la tolerancia por parte del estado, respecto a la constitución de las organizaciones de los trabajadores, pero sin ser reconocidas por gobiernos y patrones y, por lo tanto, carecían de personalidad legal para su acción de lucha.

En la cuarta etapa y gracias a movimientos de presión social que costaron sacrificios y no pocas vidas, el estado reconoce la existencia de los sindicatos y les otorga la facultad legal de actuar –incluida la huelga- en defensa de sus intereses.

En resumen, el sindicalismo es una forma de organización y de lucha de los trabajadores, en pos de legítimas reivindicaciones, por lo que los errores y desvíos que se presentan en las organizaciones obreras, ya sea por falla de los dirigentes o imposición de los grupos de poder, no altera la esencia del sindicalismo y de la ABSOLUTA NECESIDAD de sus existencia y actuación en cualquier ámbito en el que florezca la injusticia económica, política, jurídica y social.

Actualmente, en que los patrones han avanzado en contra del obrero y lo mantienen en niveles de subsistencia y no conformes con eso, están atacando las conquistas laborales como el derecho a la pensión jubilatoria, a la contratación colectiva, etc. se confirma la necesidad de la existencia de los sindicatos.

Por lo anterior es absolutamente equivocada la posición de los compañeros sindicalizados, que ante posibles errores y desvíos reniegan del sindicato, sin entender que es una institución que es conveniente proteger y fortalecer con nuestra participación; esa posición equivale a tirar al niño con el agua sucia.

La cinta “Hoffa”, que se basa en un hecho real, la constitución del sindicato de los camioneros en Estados Unidos, será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 31 de julio a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Al final de la proyección habrá oportunidad de comentar colectivamente.

Pies de foto:

La hermandad no se detendrá

No van a parar el movimiento

Si, vamos a la huelga

Lunes 27 de julio a las 18.30 hrs. En el Casino Petrolero, asamblea para informar del resultado de La revisión del Contrato Colectivo Pemex-STPRM. ASISTE.

Desaparición



Una cita con la muerte

Juan Meléndez de la Cruz

El 30 de julio de 1975, James Hoffa, el influyente y temido fundador del poderoso sindicato de los camioneros (“teamsters”) estadounidenses, fue a reunirse con alguien en un restaurante de Bloomfield, Detroit. Pero en el camino desapareció misteriosamente sin dejar rastro alguno. Y el hecho de que su cuerpo jamás fuera hallado contribuyó a crear una suerte de mito alrededor del sindicalista.

Mucho se escribió desde entonces sobre Hoffa y su enigmática desaparición, presuntamente a manos de la mafia italo-norteamericana, que para entonces quería desprenderse de uno de sus principales socios en el control de los sindicatos estadounidenses.
Los comentarios de prensa de la época recuerdan que la Cosa Nostra estaba irritada por las desmedidas pretensiones de Hoffa, un burócrata sindical que en sus tiempos de esplendor era capaz de paralizar el transporte de cargas en todo el país con sólo una palabra.

Por eso se cree que aquel 30 de julio del 75, Hoffa acudió a una cita pactada con los jefes mafiosos en un restaurante de Detroit, pero nunca llegó a destino.
Años antes de desaparecer de la faz de la tierra, Hoffa había convertido al sindicato de los camioneros en una potencia económica y política de Estados Unidos, aunque también se había convertido en un instrumento de la mafia italo-norteamericana.
Por eso, 34 años después del hecho, casi todos apuntan a la Cosa Nostra como responsable del secuestro y desaparición de Hoffa. En el pasado, pruebas de ADN en manchas de sangre en una casa donde se suponía que estuvo secuestrado Hoffa dieron negativo.

Las autoridades ordenaron remover algunas tablas de madera del piso de una casa en Bloomfield, Detroit, donde un sindicalista rival, Frank Irishman Sheeran, aseguró haber asesinado a Hoffa. Pero no se halló nada que contribuyera a dilucidar el misterio.
Con todo, la vida del sindicalista y su desaparición inspiraron una decena de libros y también la película Hoffa (1992), dirigida por Danny De Vito, en la que Jack Nicholson interpreta al dirigente de los camioneros.

Se manejan tres formas en que la mafia desaparecía los cadáveres: Incinerándolos en un horno de pan, enterrándolos en una plancha de cemento o colocándolos en un auto chatarra que era comprimido (Pulp fiction, 1994 de Quentin Tarantino). La película ofrece su propia versión, que ustedes podrán ver si asisten.

La cinta “Hoffa” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 31 de julio a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

-Esperando a D’Alessandro

-Jimmy presidente de los camioneros

-Negociando con la mafia

Voluntad de cambiar las cosas


Juan Meléndez de la Cruz

En 1998 un grupo de mujeres ganó un caso de acoso sexual contra una empresa minera. Por primera vez en los Estados Unidos (y probablemente en el mundo) una demanda era ganada por las mujeres como una “clase” afectada, es decir, no una víctima sino todo el sector femenino que laboraba en las minas ganó la demanda obligando a la empresa a crear reglamentos y protecciones laborales para prevenir y castigar el acoso sexual de las mujeres en el trabajo.

La mujer que empujó este caso se llama Louis Jensen, y la demanda que presentó junto con otras mujeres el 5 de octubre de 1984 duró varios años de tenaz lucha antes de concluir en 1998. La película se inspira en su historia.

Cuenta la vida de un personaje ficticio: Josey Aimes, una madre de dos hijos que abandona al esposo que la golpea y regresa a vivir con sus padres. Es a partir de esas circunstancias que se ve obligada a tomar un trabajo en las minas.

Dirigida por una mujer, Niki Caro, “Tierra fría” (North Country) es una película recomendable por muchas razones.

El elenco es muy bueno pues incluye a tres ganadoras de “Óscar”, Charlize Theron, Frances McDormand y Sissy Spacek. Teron en el papel de Josey Aimes, crea otro personaje singular, con una actuación sentida y profunda. Es una interpretación compleja y humana, que es aún más impactante porque los demás actores están exactamente a su nivel. En ese sentido, uno de los mayores logros de “Tierra fría” es su sentido de autenticidad.

Caro ha capturado a la perfección la cadencia de las voces y el espíritu abnegado de esta comunidad minera al norte de Minnesota. La fotografía de Chris Menges es magistral: aquí están las luces difuminadas del invierno al norte de los Estados Unidos, ese albor permanente.

El guión de Michael Seitzman crea una historia con un impecable arco narrativo. La secuencia de apertura es brillante: alterna escenas en un tribunal con escenas de la vida de Josey Aimes. De manera muy efectiva logra crear un tipo de tensión que caracteriza a las películas de intriga judicial, sobre todo porque permite contrastar a una Josey Aimes madura y endurecida por sus experiencias con la mujer más ingenua y vulnerable que se enfrenta día a día a la cultura del acoso sexual sin saber qué hacer.

En gran medida, la película se enfocará en como nace y crece su voluntad de cambiar las cosas. Lo que la hace admirable es el verdadero motivo que la hace arriesgar tanto: ella quiere un buen trabajo para poder ser una madre independiente, capaz de mantener un hogar feliz para sus hijos.

Los padres de Josey no reciben con felicidad la noticia de que ella trabajará en las minas. Hank Aimes (Richard Jenkins), el padre de Josey, es un minero, y su primera reacción es: “¿Ahora vas a ser una lesbiana?”. La comunidad no cree que las mujeres deban “robarle” trabajos a los hombres. En realidad, sólo uno de cada treinta mineros es una mujer.

La cinta “Tierra fría” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 14 de agosto a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

-Frances McDormand como Glory, primera mujer en manejar Traxcavo.

-Josie golpeada

Ven al cineclub!


Juan Meléndez de la Cruz

“Hoffa” es una película polémica. Es así por varias razones. En primera que está basada en un hecho real, la vida y desaparición de un dirigente sindical, James “Jimmy” R. Hoffa; en segunda, porque se trata de un sindicato numeroso y poderoso, el de los camioneros de E.U. con más de dos millones de afiliados, en tercera porque apreciamos la lucha de los trabajadores y como avanzan hacia la unidad y en cuarta porque muestra los vaivenes y presiones a que están sujetos sindicatos como el de los camioneros.

El lado positivo y estimulante de “Hoffa” es (como ya lo relatamos en notas anteriores) ver como el líder logra superar las dificultades que representa la movilidad de los traileros y llega a organizar el sindicato.

También el escuchar la argumentación que hace ver la necesidad del organismo de defensa de los trabajadores: No trabajar por migajas, todos tenemos a derecho a comer, no es un asunto de caridad, es un derecho tener condiciones de vida dignas; lo que pedimos los trabajadores es correcto, justo, nos lo deben Y ES POSIBLE.

Igualmente constatar que la lucha de los trabajadores siempre está llena de entrega y sacrificio y algunos son inmolados para que los más tengan mejores condiciones de vida.

El aspecto más polémico se refiere a que la cinta maneja que los sindicatos y líderes están sujetos a un juego de presiones e intereses que los llevan a pactar y asociarse con la mafia y a realizar acciones que se mueven en los linderos de la ley y que estos compromisos los llevan a poner en práctica acciones que llegan hasta el homicidio y las desapariciones.

El caso es que tiene todos los ingredientes para ofrecer un rato de sano esparcimiento. Por lo mismo insistimos para que nos acompañen a su exhibición.

Como es característico de nuestro cineclub, después de compartir las escenas podremos reflexionar colectivamente.

La cinta “Hoffa” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 31 de julio a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

-Estamos contigo

-Hoffa en triunfo

Por la solidaridad y el compromiso colectivo

Recordar los orígenes de nuestro sindicato es de suma pertinencia, no sólo por las fechas que nos remiten a la memoria; sino además por el contexto. Si bien nosotros como sindicato gracias a las luchas y los conflictos hemos aprendido que el único camino es la unidad, el sindicalismo en general sucumbe ante la embestida del mercado la crisis agudizada por el neoliberalismo y el abandono del Estado mexicano de sus más elementales responsabilidades sociales.

Lo anterior hace necesario difundir por los medios disponibles que frente al sálvese quien pueda, al egoísmo e individualismo, los valores de la solidaridad y el compromiso colectivo y social es lo que nos hace dignos de llamarnos personas humanas. José Luis Sáenz Soto.

Comparte con nosotros en el cineclub “Oro negro” del FLS la proyección de “Hoffa” que aborda el tema del sindicalismo.

Difundiendo el cartel, colaboras en esta propuesta cultural de la sección 10 y el FLS.

Unidos si podemos


Solo unidos podemos

Juan Meléndez de la Cruz

El sindicato petrolero se constituyó el 15 de agosto de 1935, mucho antes de la formación de Pemex como empresa nacional.

El camino que los trabajadores petroleros recorrieron antes de arribar a la construcción del sindicato nacional fue largo y escabroso. Inicialmente tuvieron que pelear para llegar a formar sindicatos por empresa, después enfrentar a los sindicatos blancos, enseguida superar las divisiones internas para formar un solo organismo en una misma empresa, en una misma ciudad y más adelante una sola agrupación en diferentes instalaciones, organizando coordinadoras regionales en diferentes conflictos. Esta trayectoria abarcó un período de cerca de 30 años. Dado que la explotación del petróleo en gran escala se inició en México a principios de 1900.

Antecedentes importantes a la fundación del Sindicato Nacional fueron la huelga del 9 de mayo al 8 de junio de 1934 realizada por las organizaciones de Minatitlán, Nanchital, las Choapas y Agua Dulce. En ella participaron, según los datos del Departamento Autónomo del trabajo, 3,855 trabajadores.

Esta huelga, que amenazaba con extenderse a nivel nacional, obligó al presidente Abelardo L. Rodríguez a intervenir, quien actuó como árbitro y en su laudo concedió una cláusula de exclusión, el pago del día de descanso por cada seis días laborados, períodos de vacaciones según antigüedad, reglas para las jubilaciones y jornada de 46 y media hora semanales.

El movimiento estuvo precedido por la intervención en abril del mismo año, del entonces candidato a la presidencia, general Lázaro Cárdenas, quien en su gira electoral, durante su estancia en Minatitlán dialoga con las dos agrupaciones en las que se encuentran divididos los trabajadores: la "Alianza Mexicana de Trabajadores del Águila" y la “Unión de Obreros y Artesanos y empleados de Minatitlán" las que se fusionan el 26 de abril de 1934, dando lugar al nacimiento del "Sindicato de Trabajadores del Petróleo de Minatitlán".

Esta unidad termina con un período de casi 18 años de división en el seno de las filas obreras que solo produjo riñas y muertes entre los trabajadores y beneficios para la empresa.

Otro antecedente importante fue la huelga declarada en diciembre de 1934 por los trabajadores de la refinería de Azcapotzalco propiedad del "Águila", en demanda de aumento salarial y mejores condiciones de trabajo. Al movimiento se sumaron en enero de 1935 los trabajadores de las oficinas de la misma compañía, asimismo los sindicatos de trabajadores de los expendios de gasolina, reclamaron el cumplimiento de los contratos colectivos que tenían acordados con las compañías "Huasteca Petroleum Company" y "California Standard Oil Company".

La enseñanza principal que obtuvieron los obreros de este conflicto fue la necesidad de la unidad. Esta conclusión la extrajeron de la actitud de la compañías durante las pláticas de avenimiento a que citó el presidente de la Junta de conciliación, ya que al requerírseles alguna alternativa para solucionar el conflicto, los representantes patronales respondían que no podían sugerir ni hacer otra cosa que lo que decidiera el representante de "El Águila" que era la compañía más importante.

Esta actitud firme y de absoluta unidad contrastaba con las anteriormente tomadas por los trabajadores, que afiliados a diferentes organismos luchaban separadamente y de manera continua tenían discrepancias intergremiales. El conflicto sirvió para que los representantes sindicales, al terminar la huelga acordaran reunirse para cambiar impresiones sobre la posibilidad de crear una sola organización que les permitiera mayores probabilidades de triunfo en su lucha contra las empresas.

La película “Hoffa” que muestra cómo se formó el sindicato de camioneros en E.U. será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 31 de julio a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

El líder en hombros

Obrero herido

Contexto social machista


El pan nuestro de cada día

Juan Meléndez de la Cruz

El Acoso sexual es un problema laboral, puede clasificarse esta práctica nociva en acoso vertical o acoso chantaje, de parte de un superior jerárquico hacia una subalterna, como una manifestación de poder, que se da mediante amenazas si la víctima no accede a favores sexuales, o promesa de cualquier tipo de beneficio laboral.

Y el acoso horizontal, que se da cuando una mujer es acosada insistentemente por un compañero de trabajo de la misma jerarquía o por un cliente de la empresa donde trabaja. El acoso sexual a diferencia del hostigamiento sexual, puede darse entre iguales jerarquías o incluso el acosador puede tener una jerarquía menor a la víctima.

Hostigamiento sexual se refiere a una manifestación de poder mediante una coacción con contenido sexual que proviene de un superior dirigida a alguien de menor rango.

La Guía de la Red de Mujeres Sindicalistas explica que en general esas presiones y chantajes son realizadas por supervisores o gerentes, quienes de esa forma ostentan el poder que les confiere un sistema jerárquicamente organizado, como sucede en las empresas.

De esta forma el hostigamiento sexual representa un problema laboral, donde las consecuencias no son únicamente para la trabajadora sino también para la empresa y el sindicato, ya que no sólo afecta las relaciones de trabajo sino el rendimiento laboral también

La violencia y el hostigamiento sexual representan una forma de control y un intento por desvalorizar la dignidad y el trabajo de las mujeres, expone la guía de la Red de Mujeres Sindicalistas.

Al igual que el acoso, el hostigamiento comprende tres condiciones: que las acciones sexuales, físicas o verbales no sean recíprocas; que exista coerción, es decir, la intención de causar un perjuicio o beneficio dependiendo del rechazo o de la aceptación, lo cual significa una relación desigual que produce un sentimiento de molestia en la víctima.

El hostigamiento sexual no es exclusivo del ámbito laboral, también es una práctica frecuente en el escolar, en el cual los profesores hacen uso de su autoridad para conseguir favores sexuales de las y los estudiantes a través del chantaje poniendo en juego sus calificaciones, la aprobación del ciclo escolar o el acceso a actividades escolares.

Estas acciones son favorecidas por un contexto social machista que tolera, acepta como “normales” y es el tema que aborda la cinta “Tierra fría” que será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 14 de agosto a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

Chalize Teron en “Tierra fría”

Mujeres en la mina.

No trabajar por migajas


No le temo a nada pues soy miembro del sindicato

Juan Meléndez de la Cruz

Sin duda que no es fácil construir un sindicato, para que los trabajadores lleguen, asciendan a esta forma de organización se tienen que superar muchos escollos. Tan es así que como ya señalamos en nota anterior, en México solo el 10% de los trabajadores asalariados están afiliados a un sindicato.

En primer lugar, el egoísmo en que estamos formados, nos hace pensar que mientras estemos “bien” con el patrón no tendremos dificultades, sin darnos cuenta que el trabajador SOLO frente al patrón siempre estará en desventaja; y el propietario al tanto de eso, hace todo lo posible por mantener esa situación.

En segundo lugar, lo que fundamentalmente nos interesa los obreros, es mantener el empleo y por lo tanto, pensamos que si no nos metemos en “problemas” hablando con los que quieren organizar al sindicato, no estará en riesgo nuestro trabajo.

Si a pesar de eso, los líderes, la vanguardia de los obreros logra avanzar en la organización, el empleador (Que así prefieren que se les llame) usará otros métodos para tratar de impedir la unión de los trabajadores. Nos referimos al empleo de esquiroles y rompehuelgas que, mediante el uso de la fuerza, pretenden impedir la creación de los sindicatos.

Parte de esto se puede apreciar en la cinta “Hoffa” que el cineclub “Oro negro” del FLS, proyectará el viernes 31 de julio. La película se basa en hechos de la vida real, en la vida de James; “Jimmy” Hoffa, líder de los camioneros de E.U. quién a pesar de las condiciones separación por los viajes constantes, logró la construcción del sindicato más grande del mundo.

En el momento en que los camioneros (“Teamsters”) se deciden a emplear el arma de lucha, que es la huelga, legalmente contemplada en las Constituciones de la mayoría de los países, la policía que está presente y se supone para evitar enfrentamientos entre grupos antagónicos, se hace a un lado y detrás de ellos aparecen los golpeadores y esquiroles que atacan a los obreros produciendo varias muertes entre ellos.

La película relata la forma en que Jimmy Hoffa fue realizando el trabajo de hablar con sus compañeros, argumentando que no se debe trabajar por migajas, diciéndoles que, si no está la fuerza de la colectividad para que ayude al obrero, los patrones pueden despedirte cuando quieren, dicen que nos pagan una fortuna y es una miseria, y más razonamientos en la misma dirección.

Es un líder decidido que ante las amenazas de la patronal responde: “No le temo a nada pues soy miembro del sindicato” es decir, sabe que tiene el respaldo de sus compañeros.

El tema del filme, da muchos temas para reflexión a los trabajadores y no solo.

La cinta “Hoffa” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 31 de julio a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

Esquiroles avanzando

Golpeadores contra huelguistas

Obreros muertos en la lucha

Vamos, a la huelga

Nos lo deben y es posible


No se trata de caridad

Juan Meléndez de la Cruz

La película “Hoffa” que el cineclub “Oro negro” del Frente Liberal Sindicalista proyectará el viernes 31 de julio está basada en un hecho real: la desaparición el 30 de julio de 1975 del líder sindical Jimmy Hoffa.

La cinta inicia con una advertencia. “Lo expresado en las entrevistas, es responsabilidad de quienes lo dicen, de ninguna forma reflejan la opinión de la compañía 20th Century Fox ni la de sus subsidiarias”.

La historia está narrada desde la perspectiva de su compañero y ayudante, Bobby Ciaro de ascendencia italiana. En lo que ambos esperan en un auto Cadillac de lujo, a un lado de una cafetería el arribo de un mafioso italiano que nunca llega, Bobby rememora como conoció a Jimmy y su lucha por formar el sindicato de los camioneros, “Teamsters”.

Recuerda como Hoffa se subió a fuerzas a su camión, con determinación le dijo: "puedes matarme, pero a menos que lo hagas vas a escucharme" y la argumentación que le fue manifestando a favor de la organización sindical. Efectivamente, al perder su empleo Bobby Ciaro amenaza con una navaja a Jimmy Hoffa, aunque después se convierte en su chofer, ayudante, traductor y confidente.

“Hoffa” debiera ser vista por todos los trabajadores pues va a cosas elementales que los trabajadores a veces olvidamos y que son expresadas por Jimmy Hoffa a sus compañeros para invitarlos a integrarse al sindicato.

Jimmy le señala: "Lo único que digo es que lo que pedimos es correcto y es justo, nos lo deben y es posible" (¡ojo, patrones!) pago en épocas de inactividad y seguro médico. No es un asunto de caridad el lograr condiciones de vida dignas, es un derecho de todos los trabajadores.

Y tiene razón, con el trabajo se tiene derecho a mejores condiciones de vida. Si todos los trabajadores estuvieran organizados en sindicatos, tendrían derecho a la seguridad social; esto eliminaría la caridad, no habría razón para que existiera la cruz roja; repito, no se trata de depender de la buena voluntad de los patrones, el trabajo bien pagado es un derecho que no se cumple.

Desgraciadamente, en México solo el 10% de la población económicamente activa está sindicalizada, o sea que cerca de 30 millones de trabajadores no cuentan con la organización elemental que los represente ante el patrón y que les pueda permitir lograr mejores condiciones de vida.

Igualmente Hoffa arenga: “Te dicen que vas perder el empleo, pero al contrario, el sindicato te lo garantiza”, “No trabajes por migajas, todos tenemos derecho a comer, únanse a los suyos”. Para los trabajadores hay mucho que reflexionar al ver esta proyección, por eso los invitamos.

La cinta “Hoffa” será proyectada por el cineclub “Oro negro” del FLS de la Sección 10 el viernes 31 de julio a las 19 horas en el auditorio de la sucursal transportes de la Sociedad Cooperativa de Producción del Frente Liberal sindicalista, situado en la calzada de los Petroleros s/n, (a un lado de la delegación de tránsito) colonia Petrolera de Minatitlán. La entrada es libre y para todo público.

Pies de foto:

Bobby amenazando a Jimmy

El auto de la muerte

Únanse a los suyos